Echando las Redes

La Iglesia mexicana lamenta aprobación de ley que permite los matrominios homosexuales

Martes, 22 dic (RV).- En México, la Asamblea Legislativa del Distrito Federal aprobó el lunes 21 de diciembre la iniciativa de ley que permite los matrimonios de homosexuales, un reconocimiento que aún no existe aún en otros países de América Latina. Ante esta situación, que si bien es local, puede tener repercusiones en el resto del país, surge preocupaciones al interno de la Conferencia Episcopal.
Fuente: Radio Vaticano




Jérome Lejeune, un científico camino a los altares

El arzobispo de París, monseñor André Vingt-Trois, previa confirmación de la Santa Sede, nombró al padre Jean Charles Naud, prior de la Abadía de St. Wandrille, postulador de la causa de beatificación Jérôme Lejeune. De este modo comenzó el tan esperado proceso en ámbito diocesano.

El doctor Jérôme Lejeune a los 33 años, en 1959, publicó su descubrimiento sobre la causa del síndrome de Down, la trisomía 21, hecho que lo convirtió en uno de los padres de la genética moderna.

En 1962 fue designado experto en genética humana en la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en 1964 fue nombrado Director del Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia y en el mismo año se creó para él en la Facultad de Medicina de la Sorbona la primera cátedra de Genética fundamental. Se transformó así en candidato número uno al Premio Nobel.

Aplaudido y halagado por los “grandes del mundo”, dejó de serlo cuando en 1970 se opuso tenazmente al proyecto de ley de aborto eugenésico en Francia: matar a un niño por nacer enfermo, es un asesinato y además abre las puertas a la liberalización total del crimen del aborto.

En esos meses participó en Nueva York en la sede de la ONU en una reunión en la que se trataba de justificar, ya entonces, la legalización del aborto para evitar los abortos clandestinos. Fue en ese momento cuando refiriéndose a la Organización Mundial de la Salud dijo: “He aquí una institución para la salud que se ha transformado en una institución para la muerte”. Esa misma tarde escribió a su mujer y a su hija diciendo: “Hoy me he jugado mi Premio Nobel”.

La defensa de Lejeune del ser humano desde la concepción se basó siempre en argumentos científicos-racionales antes que en cualquier consideración religiosa.

Rechazó científicamente no sólo el crimen abominable del aborto, sino conceptos ideológicos como el de pre-embrión. Por esas razones lo aislaron, lo acusaron de integrismo y fundamentalismo y de intentar imponer su fe católica en el ámbito de la ciencia.

Fue incomprendido y perseguido en ámbitos eclesiales, y aislado por sus colegas. Pero en ningún momento escuchó a los prudentes que le aconsejaban “callar para llegar más alto y así poder influir más”: las estructuras de pecado no se pueden cambiar, sólo hacen cómplices. Hizo caso omiso también de los que le decían que estaba sumiendo en la miseria a su familia, ya que le fueron cortados todos los fondos para sus investigaciones de las cuales vivía: continuó con sus investigaciones, sostuvo a su familia y se financió dando conferencias.

Juan Pablo II, en carta al cardenal Lustinger, entonces arzobispo de París, con motivo de la muerte de Lejeune decía: “En su condición de científico y biólogo era un apasionado de la vida. Llegó a ser el más grande defensor de la vida, especialmente de la vida de los por nacer, tan amenazada en la sociedad contemporánea, de modo que se puede pensar en que es una amenaza programada. Lejeune asumió plenamente la particular responsabilidad del científico, dispuesto a ser signo de contradicción, sin hacer caso a las presiones de la sociedad permisiva y al ostracismo del que era víctima”.

En 1992 Jérôme Lejeune comenzó, a pedido de Juan Pablo II, la gestación de la Pontificia Academia para la Vida, creada por el Santo Padre el 11 de febrero de 1994. El 26 de febrero de ese año recibió, ya en su lecho de muerte, el nombramiento de Presidente de la Academia. Entregó su alma a Dios el Domingo de Pascua de 1994 (3 de abril).
Fuente: Aica




Entregaron los premios Magníficat

La Asociación de Radiodifusores Católicos Argentinos (ARCA) entregó los premios de la 8ª edición del concurso Magníficat, para la producción radial, durante un acto realizado el pasado 18 de diciembre, en la sede de la Acción Católica Argentina (A.C.A.), entidad que también auspicia esta distinción.

La premiación contó además con la adhesión de la agencia AICA, el Círculo Católico de Obreros, ACIESTI y el Club Gente de Prensa.

El programa “Cristo, ayer, hoy y siempre” fue el gran vencedor del certamen -entre todas las categorías- y el premio destacado, mientras que el premio de la A.C.A. destinado a la mejor producción que testimonie la solidaridad y la paz social de los argentinos, correspondió a “Didascalio en casa”, el esfuerzo de una maestra junto con los alumnos del nivel primario del colegio Santa Teresita, de Lomas de Zamora. La presencia de los niños dio una nota de color al encuentro.

El acto fue presidido por presbítero Osvaldo Bufarini, titular de ARCA, junto con dirigentes de la institución laical. El secretario Ignacio del Castillo, quien dio la bienvenida a los participantes; Mario Pellegrino, responsable del Área Sectores, y Marta Noce, a cargo del sector Arte y Comunicación de la A.C.A.

Los programas ganadores en cada categoría fueron: “Cristo, ayer, hoy y siempre”, de Radio Fuego 97.1, de Banfield, cuyo responsable es Miguel Gorosito, en categoría 1, rubro A, periodístico, de interés general o magazines. También le correspondió el premio al mejor sobre todas las categorías, por el que ARCA le entregó 750 pesos.

En el rubro B, destinado a la temática cultural, educativa, social, infantil o juvenil, fue reconocido “Didascalio en casa”, programa de 25 minutos semanales, que emite Radio Nuestra Señora del Encuentro FM 91.3, de Lomas de Zamora, y que congrega a la docente María del Mar Paladino junto a los alumnos, de 3º y 4º grado, del colegio Santa Teresita del Niño Jesús, del barrio 2 de Abril. La radio es dirigida por la Hna. Ana María de Inés, de la congregación Lumen Dei. A ellos también el jurado les adjudicó el premio especial de la Acción Católica Argentina (un aporte de 600 pesos), que fue entregado por los dirigentes de la citada Institución, Ignacio del Castillo y Mario Pellegrino, tal como lo refleja la imagen. El programa se emite durante el ciclo escolar.

En el rubro C, para programas religiosos y música cristiana, el elegido fue “Solo le pido a Dios”, que emite FM Raíces 88.5, de José León Suárez, con la participación de Adriana Santillán.

En la categoría 2, artística con creatividad y valores, fue reconocido en primer lugar, “Volver a Dios”, de FM San Cayetano 102.7, Corrientes, a cargo de María Claudia Fernández y en la categoría 3, de producción educativa y de estímulo a los jóvenes, el vencedor fue “Café en mano”, de la emisora La Salle San Martín, de la provincia de Buenos Aires, y en el que participan Paola Salietti, Axel Policani, Julieta Menichelli, Joaquín Díaz y Florencia Adorante.

Finalmente en la categoría 4, para portal web de radio o de programa radial, ganó www.elalfaylaomega-elprograma.blogspot.com de FM Crisol 92.3, Los Polvorines, de Alfredo Musante.

Los ganadores recibieron una estatuilla de la Virgen de Luján y los participantes, un diploma que acredita su presentación.
Fuente: Aica